Ante la llegada del Año Nuevo en Estados Unidos, surge la interrogante por saber dónde dejar a tu mascota para garantizar su bienestar durante las festividades. A continuación te mostraremos algunas alternativas disponibles en algunos estados.
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¿Dónde dejar a mi mascota por Año Nuevo en Estados Unidos?
- Loews Coronado Bay Resort en Coronado, California: ofrece una experiencia única para perros y gatos con identificación personalizada, platos de comida, camas lujosas y servicios exclusivos como comida gourmet para mascotas. Además, se brindan clases de surf y paseos, con un cargo de $100 por estadía.
- Ritz Carlton, Bachelor Gulch en Avon, Colorado: permite a los perros participar en paseos diarios y actividades caninas durante Furry Paw Fridays. También ofrecen masajes, cenas con opciones naturales y postres para tu mascota. El cargo es de $125 por las primeras tres noches y $25 adicionales por noche, con una donación de $25 a la ASPCA.
- Mandarin Oriental en Miami, Florida: proporciona lujos para mascotas, incluyendo envases de agua y comida, menús especiales y camas cómodas. Además, se ofrecen paseos diarios y opciones de ejercicios con entrenador certificado. El depósito es de $200, con $100 reembolsables al final de la estadía.
- Muse Hotel en Nueva York: acepta todo tipo de mascotas. Los perros y gatos disfrutan de platos, camas, meriendas orgánicas y juguetes. Se pueden coordinar servicios adicionales como cuido y masajes. No hay cargo por mascota.
- Topnotch Resort en Stowe, Vermont: invita a los humanos a traer a sus perros a disfrutar de rutas de senderismo y actividades al aire libre. No se aceptan gatos. No hay cargo por mascota, y se ofrecen recomendaciones de rutas y sesiones de Reiki en el spa, así como camas de aire y mantas de lana.
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¿Qué pasa con los perros en las fiestas de fin de año?
Los perros pueden experimentar estrés durante las fiestas de fin de año debido a una variedad de razones. Los cambios en la rutina diaria, como horarios de alimentación y paseos, pueden generar ansiedad en los perros, que son criaturas de hábitos. Además, el aumento de la actividad humana, la presencia de visitantes y el ruido asociado con celebraciones como fuegos artificiales pueden resultar abrumadores para los perros, que son sensibles a los estímulos auditivos.
